Planificar el presupuesto para el próximo año no es una opción, sino un paso necesario para evitar que la empresa tenga problemas a corto y mediano plazo. Las pequeñas y medianas empresas (pymes) no cuentan con un área específica para realizarlo, por lo que lo dejan para después o lo omiten.
Josefina Mera, CEO en ContaMC, explica que el presupuesto es una herramienta indispensable para que las empresas planifiquen mejor sus recursos.
Cuando tú realizas un presupuesto puedes anticiparse y saber qué funciona para reducir la incertidumbre en el futuro”.
Sin embargo, la falta de educación financiera en las pymes las pone en riesgo en su operación. En México, el 28% de las empresas no realiza la planificación financiera, de acuerdo con la Asociación de Emprendedores de México (Asem).
Un error común es considerar la utilidad antes que el flujo de caja como un buen indicador y esto daña la planificación financiera, advierte Jorge Alvarado, presidente de la Comisión Técnica Sector Empresarial del Colegio de Contadores Públicos de México
“La utilidad es vanidad y la caja es la realidad. Hay que tener cuidado para no crear una falsa expectativa”, señala.
Por otra parte, el 18% de las empresas no usa indicadores financieros, lo cual es un error porque desconocen el estado de la misma.
Los especialistas mencionan que las pymes cometen la equivocación de que mientras ven ingresos, asumen que todo está bien, pero, cuando notan retrasos en los pagos y aumentan las deudas, es cuando el problema se hace visible.
El tiempo ideal de las pymes para planificar el presupuesto es de noviembre o diciembre, en tanto, Jorge Alvarado aconseja proyectar tres escenarios para definir el presupuesto para el próximo año.
El primero es considerar un panorama pesimista, es decir, ¿qué pasaría si las ventas caen un 15% a comparación de meses atrás? Una recomendación es planificar una caja de ahorro de tres meses.
El segundo escenario es con un enfoque más realista, en el que se “considera un crecimiento moderado casi pegado a la inflación”.
Mientras que el tercer escenario es más optimista, en el que se proyecta un año de incremento en los ingresos y gastos más controlados.
En el caso de las pymes, la planificación del presupuesto es necesaria para evitar su cierre, debido a que forman parte significativa de la economía en el país. Por ello, estos son algunos puntos a considerar:
El primer punto es iniciar con la definición del objetivo, en el que se traza el rumbo del negocio e identificar áreas de mejora; el segundo es recopilar toda la información financiera y contable.
La información de primera mano siempre viene de la contabilidad, porque vemos ingresos, facturación, gastos, entre otros. Con esto, se crea una base en la que puedes visualizar hacia dónde va el negocio”, reitera Josefina Mera.
En esta misma línea, Jorge Alvarado aconseja a las pymes priorizar la liquidez, porque es la “sangre empresarial”, aunado a informarse sobre los estados financieros, tener en cuenta las deudas por cobrar y pagar.
Asimismo, recomienda a las pymes usar como alternativa la estrategia de base 0, la cual es considerar cada uno de los gastos como si el negocio estuviera desde sus inicios.
Finalmente, los especialistas aconsejan considerar los gastos fijos como la renta, agua y luz y las futuras eventualidades, como el Mundial 2026 y los ajustes en materia laboral y fiscal.
